
Es obvio que existe una fuerte relación entre el éxito y la felicidad; pensemos, simplemente, cómo nos sentimos cuando obtenemos un ascenso laboral, unas buenas calificaciones académicas, etc.
Pero, ¿es el éxito el que lleva a la felicidad, o puede que la felicidad también nos lleve al éxito?
Según la Dra. Sonja Lyubomirsky y cols., parece que la felicidad puede llevarnos a tener más éxito. Estos investigadores llegaron a tal conclusión al realizar determinados experimentos en los que inducían un estado de ánimo positivo o negativo a un grupo de personas; posteriormente, evaluaban la calidad de su ejecución en determinadas tareas, observando que los grupos con mejor estado anímico obtenían mejores puntuaciones.
En estos estudios , además, encontraron que las personas más felices se caracterizaban por realizar determinadas conductas con más frecuencia:
- Hablar con la gente.
- Interesarse por actividades de ocio: salir con los amigos, ir de vacaciones, salir a cenar, etc.
- Disfrutar esas actividades sociales más intensamente.
- Resolver con eficacia los conflictos: tienen mayor tendencia a colaborar para resolver un conflicto que a evitarlo.
- Ayudar a los demás.
- Sentirse más sanos. La gente con mejor estado de ánimo experimenta menos dolor y se perciben más saludables.
- Ser más creativos. Piensan de forma original y flexible
- Realizar mejor tareas complejas.
- Atribuir sus éxitos a sus propias habilidades, más que a la suerte o a otros factores externos a su control.
¿Os identificáis con estas conductas?, ¿creéis que llevarlas a cabo puede hacernos más felices?
Este artículo, escrito por Alberto Soler Sarrió se encuentra bajo una Licencia Creative Commons Atribución-NoComercial-CompartirIgual 3.0 España.